Prueba Jaecoo 7. Un SUV 4×4 nuevo que parece conocido.
Primo hermano de los Omoda, Jaecoo entre paralelamente en nuestro mercado proveniente de oriente. Son marcas del mismo grupo y con la intención de tener su propia personalidad. Exteriormente, no podemos evitar que nos recuerde a otros modelos del mercado. Tanto en el frontal como en el lateral, percibimos líneas que nos recuerdan a otros SUV del mercado- La parte delantera con una parrilla muy vertical y de generoso tamaño impresiona y transmite sensación de robustez. El lateral se muestra elegante y armonioso, con un diseño muy “europeo”. Está bien resuelto con las manecillas de las puertas escamoteables, según nos acerquemos o alejemos. Utiliza unas llantas exclusivas de 19 pulgadas, de diseño casi lenticular. La parte trasera también tiene su estilo, teniendo un discreto extractor y unos no tan discretos dobles escapes, artificiales, ya que cuenta con uno lateral convencional. El interior está bien resuelto con espacio y huecos de sobra y asientos cómodos incluso en largos desplazamientos. Los traseros no le van a la zaga, y permiten espacio para pasajeros con envergadura si son dos, con una plaza central algo más justa. El maletero, cubica 340 litros, llegando a 1265 con la segunda fila de asientos abatida. Lo mejor, tiene ¡RUEDA DE REPUESTO! De emergencia, pero tiene. El motor es un 1.5 TGDI, que da 340 caballos al combinarse con uno electico capaz de alcanzar los 90 kilómetros lo que permite autonomías superiores a los 1000 kilómetros. Se complementa con un cambio automático de siete velocidades. A bordo, se respira calidad y menos acabados. Buena insonorización y suavidad continúa. Contamos con pantallas según el acabado de hasta 14,8 pulgadas, y máximas facilidades de acceso y arranque por que nos detecta al llegar poniéndose en marcha y al salir parando. Hasta siete modos de conducción, nos permiten rodar en función del tipo de vía que estemos utilizando, con buenos tarados de suspensión en cualquier caso. Merece la pena por tamaño y prestaciones, siendo una buena solución para particulares y profesionales. Nos ha gustado por ser honesto con lo que ofrece y contar con el factor diferencial de poder moverse fuera del asfalto con más garantías que muchos de sus rivales. Hay que pagar más de 42000 euros para hacerse con uno, aunque las versiones de tracción a un eje arrancan en 400 euros menos. En el monte, se puede sobrevivir. Bajo la apariencia de SUV familiar, el Jaecoo cuenta con argumentos para poder salir del asfalto. Cuenta entre sus posibilidades de conducción, con un modo ”todo terreno» que adapta tracción y suspensión a terreno con irregularidades. El complemento perfecto serian unos neumáticos mixtos, que permitirían aun mejor adaptación a las pistas u los caminos. En un escenario donde la oferta de 4×4 capaces se encuentra en vías de extinción, este vehículo se puede tener en cuenta.