Prueba Ford Ranger Wildtrak. La pick up 4×4 de todos los días.
Hemos probado las versiones más prestacionales del modelo, las Raptor de gasolina y Diesel. Nos quedamos con las ganas de conocer el acabado de acceso, algo que ahora hemos podido concretar. Existe una versión aun más básica, que con un motor de 170 caballos y menores ayudas a la conducción fuera de asfalto, pensada para empresas y trabajadores que lleven a cabo un uso mayoritariamente profesional. Nos hemos subido a la más equipada del acabado. Esta Wildtrack también es atractiva transmitiendo robustez y capacidad al primer vistazo. Lo que más la diferencia de sus hermanas mayores son las llantas y el neumático de taco, ya que en eta ocasión son más pequeñas y montan unos Goodyear Wrangler totalmente de asfalto. Los bajos, tienen unas protecciones mejores de lo habitual lo que nos permitirá con cuidado rodar por zonas rotas. En la parte trasera se ubica la rueda de repuesto, que es idéntica a las cuatro rodantes incluida la llanta. Todo un detalle. La caja de carga, es común a toda la gama. Nuestra unidad contaba con tapa automática. Se mantienen las tomas eléctricas para todo tipo de aparatos. Contamos con un peldaño en cada lateral que ayuda a acceder a lo que estemos colocando. Además de cargar, la capacidad de remolque es de 3500 kilogramos, cifra considerable. El motor en este caso es un 3000V6 que da 240 caballos, que nos parecieron suficientes para mover esta Ranger. Se mostró progresivo en cualquier circunstancia y en cuanto al consumo a nosotros sin ir a economizar, con dos ocupantes y su equipaje rodando con la tracción total ocasionalmente, y con bastante barro alcanzamos los 14 litros, lejos de los 10 anunciados por el fabricante. El uso que le demos influirá bastante en este aspecto. El interior es el de una buena berlina. Materiales de calidad, buenos asientos con tacto agradable donde se toque. Muchos huecos para objetas invitando todo a salir de viaje de inmediato. El logo de este acabado se encuentra en diversos puntos del coche como el exterior o el respaldo de los asientos. Las plazas traseras, son más que correctas para lo que se estila en las pick up con una inclinación menos vertical de lo habitual y espacio para tres si no son muy corpulentos. En marcha disfrutaremos del confort de un vehículo Premium en una “camioneta” pura y dura. Posición de conducción perfecta, suavidad en todo y confort continúo. En tráfico urbano, no debemos olvidar que movemos más de cinco metros, pero las ayudas al aparcamiento y la eficaces cámaras ayudan lo suyo. En carretera, muy buen comportamiento general, con unos tarados de suspensión correctos y un andar noble y seguro. El sistema de tracción en la posición de Automático, hace ganar en confianza, sobre todo en vías rápidas con piso deslizante. No se notan los kilómetros y haciendo memoria respecto de las Raptor nos resulto más eficaz, al contar con neumático de asfalto menos ruidoso y con más agarre en carretera. Existe una Wildtrak desde 55000 euros según descuentos, y nos parece que con la diferencia, con montar un neumático mixto, nos defenderíamos en pistas y caminos y ahorraríamos un buen dinero para emplear en viajes respecto de sus hermanas mayores además de tener un plazo de entrega más corto y un uso más polivalente. Lo dicho, para todos los días. Vistas juntas se pueden afirmar que hay diferencias, pero desde luego hay muchas más similitudes. En el monte, muy capaz. Es una delicia esta Ranger. Contamos con buenos argumentos a favor, casi 22 centímetros de altura libre y buenos ángulos para ser este tipo de vehículo. La suspensión se adapta bien a las irregularidades aunque la probamos sin apenas peso atrás. Dispone de varios modos de conducción pero sobre todo domina una rueda que permite pasar desde simple tracción trasera a total con reductora. Lo complementa la posibilidad de bloquear el diferencial trasero. Mejoraría lógicamente con un neumático mixto en una medida más de la de origen. Las pick up, siguen siendo una opción prioritaria para quienes necesitan un todo terreno de verdad. Suben de precio pero los pocos todo terrenos convencionales que ofrece el mercado han subido aun más.