Esta iniciativa pretende recuperar el gusto por la conducción off road exigente y autónoma. La edición 2014 tuvo lugar en el complejo off road de Masia Pelarda.
Texto y fotos: Cortesía organización.
Bajo el principio incombustible ‘ves tan despacio como puedas, corre cuando debas…’ la I edición del Trophy Classic tuvo lugar en el complejo off road de Masía Pelarda, en Teruel. Quince equipos, uno de ellos proveniente de Alemania, aceptaron el reto de lanzarse a una aventura tremendamente exigente en la práctica del 4×4, pero abordable por cualquier vehículo todoterreno con el necesario espíritu de equipo. El menú diseñado por el equipo del TC con Chema Huete al frente y la complicidad de los hermanos Nadal, Antonio y David, para este Trophy Classic 2014 comprendía el franqueo de obstáculos continuado en los circuitos rojo y negro de Masía Pelarda, actualizados para la ocasión con más zonas rotas y de agua y el descubrimiento de otros trazados nuevos, muy técnicos, solo superables con el esfuerzo, la colaboración, la imaginación y la decisión de todos. Surcos, roderas, pendientes laterales interminables, desniveles de hasta seis metros, descensos aparentemente imposibles… Todo dispuesto para que todos los participantes, los viejos zorros con sus cacharros de siempre y los conductores más noveles, con sus TT alicatados hasta el techo, pudieran emplearse a fondo, codo a codo, intensamente, pero sin prisas para salir airosos del envite sin dañar las mecánicas. Este objetivo aparentemente contradictorio e imposible de cumplir ante la exigencia de las dificultades del trazado planteado fue logrado con creces. La idea de participar con el coche del día a día y volver a casa a bordo del mismo se cumplió sobradamente. Solo uno de los equipos inscritos sufrió una avería mecánica en su montura que le impidió continuar en un escenario con fases más propias de una prueba ‘x-trem’ y, en algunas situaciones, más dificultosas que las dibujadas en cualquier prueba de trial 4×4 de las que se disputan en el país.
Con este guiño a las épicas de las grandes aventuras del siglo pasado como Camel, el Outback y algunas que perviven como el Lagoda, etc… comenzaba el pasado viernes 21 de marzo el TC 2014 con una prueba de orientación clásica, brújula en mano y una sesión nocturna de franqueo de obstáculos. El sábado 22 fue el día grande del I TC. Una jornada repleta de sorpresas y retos aguardó a los participantes hasta la madrugada del domingo Los recorridos distribuidos por las cerca de las 400 ha. de Masía Pelarda fueron bautizados con los nombres de algunas de las ediciones más emblemáticas del Camel Trophy. Los carteles Trans Amazónica, Madagascar y Burundi acompañadas del genérico Lagoda anunciaban el inicio de los trayectos diurnos diseñados en este Trophy Classic 2014 mientras que Rubicon Trail quedaba para la hora de los lobos. Brújula en mano, los equipos utilizaron rumbos y distancias para acercarse a ellos. Entre los recorridos diurnos planteados, el Lagoda –que hace honor a la durísima prueba que se disputa en los alrededores de San Petersburgo- fue sin duda el más selectivo y el que hizo necesario sumar más esfuerzos para avanzar. El recorrido sobre terreno diverso y algo resbaladizo, de poco mas de un kilómetro, llevó cerca de cinco horas hasta completarlo. La abundancia en pendientes de todo tipo, pasos estrechos puntualmente salpicados con notables obstáculos rocosos en relieve requirieron una buena evaluación del terreno y el uso del material de rescate –planchas, tráctel, winch, etc..- para afrontarlos con éxito. Mediada la tarde, el desafío de la etapa nocturna va adueñándose del pensamiento colectivo. “800 metros a la hora. Ese es el mejor pronóstico que podemos ofreceros para afrontar un recorrido de unos 5 kilómetros de intensa negociación de obstáculos, que en todo momento exigirá una observación atenta del terreno…” reza el programa facilitado por la organización. Sobre las cero horas del domingo, cuatro horas después de la salida, la totalidad del grupo alcanza el ecuador de la prueba. Un buen caldo caliente servido a pie de zona por la cocina de Masía Pelarda -¡¡Gracias Ana y Sole!!- y el sentimiento de saberse parte de un pequeño hito animan a todos a seguir adelante bajo un cielo límpido, extraordinariamente estrellado. Otro par de horas por delante…
El domingo 23 clarea amenazador. Viento gélido, muchas ojeras, pero también mucho ánimo para encarar la recta final del Trophy Classic 2014. Solo una baja por avería mecánica, pero sus ocupantes permanecen en activo, ayudando a sus compañeros en la machina, la última prueba colectiva programada. Todos quieren estar presentes en esta barra libre de 4×4 que cierra al medio día con una comida de hermandad, menciones y entrega de regalos para todos.
El TC 2014 es historia ¡Viva el Trophy Classic 2015¡
Mas info en www.trophyclassic.com