Para el fabricante francés la única limitación a la hora de poner a los dos vehículos en el parque cerrado de la carrera fue simplemente la reglamentaria existente en cada una de las épocas. El 205 venia de ser protagonista del Mundial de Rallies a mediados de los ochenta y para poder correr en África con garantías, se mejoraron los recorridos de suspensión reforzando trapecios y rotulas para garantizar la mejor tracción 4×4. Se alargó la carrocería 33 centímetros para poder acoplar un deposito de 190 litros, ya que aquellos eran Dakares serios, de tres semanas de competición y varias etapas de mas de mil kilómetros y ..! a correr !
El 3008 DKR, es lo ultimo de lo ultimo en competición todo terreno. Reconvertido a buggie de tracción trasera, su suspensión de ultima generación, que le permite mantener el ritmo independientemente del estado del terreno es su mejor argumento. Mas electrónica, menor consumo y sobre todo aire acondicionado, mejoran la calidad de vida respecto de sus hermanos mayores.