La piloto burgalesa, ya repuesta de su esplendido y extenuante trabajo en el recién celebrado Dakar americano, ha estrenado una unidad de Eclipse Cross el ultimo modelo incorporado al portfolio del fabricante japones. Es un Mitsubishi que la ha gustado desde el primer momento, según sus propias palabras:
“Sin duda, un gran coche. Con un equilibrio perfecto. Me ha sorprendido, sobre todo, la respuesta de su motor gasolina turboalimentado que empuja desde muy abajo y le hace muy alegre. Esto, combinado con el nuevo chasis, le confiere un dinamismo extraordinario. Tienes un coche divertido cuando quieres, pero también cómodo y buen devorador de kilómetros. Tecnológicamente hablando está a un gran nivel. La pantalla extraíble en el cockpit marca la diferencia. Además, estéticamente es imponente. Ahora mismo, es el rival a batir y a mí me ha conquistado”.