Las ventas de los SUV se encuentran en el nivel de decir que de cada dos coches que se venden, uno es del modelo. Es una tendencia al alza desde hace años y aunque en su práctica totalidad los que llegan a nuestras calles son con tracción a un eje hay un pequeño número de clientes finales que los adquieren con tracción 4×4 por aquello de ganar en seguridad o por tener intención de circular fuera del asfalto. Para ellos se ha puesto en marcha esta I Experiencia SUV, con el patrocinio de Promyges y la colaboración de Tripy y Toyota Kobe Motor, en la que estaban excluidos modelos con reductora y/o puente rígido delantero para evitar la presencia de todo terrenos convencionales.
Los participantes, con una media de edad totalmente juvenil fueron llegando el viernes a las instalaciones del Rincón de Barrachina donde estarían alojados durante el fin de semana. Con el grupo al completo, con variedad de modelos presentes, se llevo a cabo un breafing previo a la cena concretando los pormenores de lo que se iba a vivir el fin de semana. El sábado de buena mañana cada participante recibió un rutometro digital Tripy que responsables de la marca colocaron en cada coche además del convencional en papel. Por delante casi 200 kilómetros de recorrido, desde Barrachina hasta la laguna de Gallocanta, a la que se dio la vuelta y regreso a la base. Buenos paisajes, pasos a veces complicados para este tipo de vehículos aparecieron a lo largo del recorrido.
Para el domingo, otra ruta de cincuenta kilómetros y poder rodar libremente por el circuito homologado donde ruedan para entrenar las estrellas de la especialidad, conformaban la parte activa, terminando con el sorteo de regalos y la comida de despedida. De los vehículos presentes, el Toyota Rav 4 de última generación fue el más moderno y llamativo, además de ser el único híbrido presente en el parque cerrado. Ya se trabaja en la próxima edición donde se prevé un aumento de participantes que deben de perder el miedo a sacar el máximo partido a sus SUV 4×4.
