Pese a que desde la organización, se intenta tener controlado el número de participantes, la presión de muchos interesados, ha dejado atrás los 80 vehículos habituales, debiendo crecer hasta los 110, dejando fuera una numerosa lista de espera.
Con un día primaveral, se comenzó en el ayuntamiento a recibir participantes, en una casa consistorial rodeada de vehículos. La bolsa de bienvenida como es habitual, no solo contenía dorsales, rutometros y demás, sino que incluía productos típicos de la zona.
A la hora de comer, el grupo estaba completo, con participantes venidos de toda Andalucía y demás comunidades autónomas incluidas las islas canarias. Un potaje sirvió para coger fuerzas para lo que se avecinaba.
Como de costumbre en el mismo casco urbano de la localidad cordobesa, se prepararon una serie de zonas de diferente dificultad, sin duda más complicadas que otros años y es que entre los presentes se hallaban varios prototipos de trial y extremo.
Pese a que pilotos y copilotos se emplearon a fondo, algunas resultaron muy complicadas por lo que se retocaron para hacer disminuir la inclinación y complejidad de algunos pasos.
No obstante vehículos de preparaciones poco más que convencionales se atrevieron a participar llevando a cabo saltos y piruetas muy del agrado del numeroso público. Con la caída del sol, se comenzó a dar salida a la caravana, que recorrió los alrededores de La Carlota en un recorrido de cerca de 100 kilómetros. Según se llegaba al final se esperaba a los ruteros con caldo y un guiso de costillas.
El domingo de buena mañana, y con aun mejor climatología, una ruta de mayor kilometraje llevaba a los participantes hasta el plato fuerte habitual, el circuito de motocross abandonado de Almodóvar del Rio, donde los más activos evolucionaron por los distintos accidentes del terreno.
De vuelta al Ayuntamiento, un arroz campero y la entrega de trofeos, que incluía los del concurso fotográfico, de los que daremos reseña en unos días, dieron por concluida la actividad.
Esta, es a beneficio de la Asociación Local de Lucha contra el Cáncer, que tiene en la ruta la mayor inyección económica que reciben en el año, ya que los más de 6000 euros conseguidos suponen más del 30% de lo que consiguen.