Con salida en Barcelona y destino final en Portugal, la cita reservada a vehículos clásicos, tuco un primera parte sobre terreno seco y polvoriento para vivir una segunda pasada por agua.
La categoría 4×4 tuvo como vencedores al Mitsubishi Montero de Boquer-Buxeda, seguidos del Fiat Panda de Marín González y el Suzuki Vitara de Bosch-Font.
En todo momento se respetaron las obligaciones impuestas por la situación socio sanitaria, por muy peculiar que fuera la situación.