Por segundo año consecutivo, los propietarios de este vehículo se reunían para disfrutar de un fin de semana de actividades y confraternización. Si el año pasado fue Aragón el escenario, para la ocasión se llevo a cabo a caballo entre las Comunidades de Madrid y la de Castilla León.
La recepción de participantes tuvo lugar en un hotel madrileño donde fueron llegando paulatinamente los Toyota que tenían kilómetros de desplazamiento, y que venían de Aragón, Castilla la Mancha, Castilla León, Comunidad Valenciana, Andalucía y Región de Murcia. Tras cenar todos juntos, el personal estaba preparado para la acción.
El sábado por la mañana, el grupo estuvo invitado a desayunar en el concesionario Toyota Kobe Motor en su sede central de Majadahonda, reforzado en presencia por los inscritos tienen como base Madrid. Alberto Dorsch, Director comercial y piloto en activo del Nacional de Todo Terreno, pese a tener compitiendo vehículos en el Circuito del Jarama y en el portugués Rally de Fafe, no quiso perderse una ocasión como esta en la que una decena de unidades de RAV 4 MK1 se reunían por primera vez. Tras presentar el programa, se llevo a cabo la foto de rigor que inmortalizaba el acto.
El grupo de coches reunía a tres primera serie y siete de la segunda, uno de ellos de caja de cambios automática. Todos salvo la unidad que aportaban los hombres de Kobe (en plena fase de preparación), montaban neumático mixto, amortiguación mejorada respecto de la configuración de serie y cubre carter, manteniendo un estado de conservación optimo y en algunos casos excelente, lo que demuestra el interés de los dueños en sus Toyota además de demostrar que los sacan al monte con asiduidad.
Posteriormente la caravana se dirigió por asfalto a la localidad segoviana de El Espinar, base del recorrido fuera del asfalto previsto. La ruta, de cerca de cien kilómetros de recorrido tuvo dos partes diferenciadas, la primera por caminos de linde y tierras de cultivo con continuos cambios de rumbo, sobre pistas en perfecto estado ya que se encontraban recién repasadas por maquinaria de obra pública por lo que el avance fue sencillo.
La parte final de este tramo acababa sobre el puente construido para la primera comunicación sería llevada a cabo hace más de un siglo entre Ávila y la propia Segovia.
Llegó la hora de reponer fuerzas y esta se hizo en la Alameda de la Fuencisla a los pies del Alcázar segoviano. Fue el momento del reparto de regalos, que no sorteo, ya que hubo presentes para todos. Estos fueron donados por la propia Toyota Kobe Motor, Promyges y Eurospare.
Por la tarde, recorrido más abrupto, comenzando en monte bajo y concluyendo en un pinar interminable muy del agrado de todos. Lo mejor para muchos, el avistamiento de la fauna existente en la zona, sobre todo rapaces y ungulados. Diversos pequeños pueblos jalonaron el recorrido y poco después coincidiendo con la caída de la luz, se concluyó la ruta llegando de nuevo a El Espinar, esta vez en pleno casco urbano, donde por gentileza del Ayuntamiento de la población se acordonó una calle céntrica donde aparcar los RAV y disfrutar de la Fiesta de Los gabarreros que se celebraba esos días. En concreto en esa velada se encendía el “Árbol de Fuego”, pieza de barro que se alimenta continuamente para que no se apaguen las llamas.
De esta y otras historias de la fiesta declarada en 2003 de interés turístico regional, dio detalles al grupo D. Jesús Gascón, Concejal de Medio Ambiente, Eficiencia Energética, Turismo y Comunicación de la localidad segoviana. En su explicación hizo ver que todo el festejo estaba enfocado a recordar el duro trabajo de la extracción de leña desde tiempos inmemorables. Con una cena de productos típicos, y posterior velada en el hotel donde se alojaban los participantes se dio por finalizada la segunda jornada de la reunión.
Para el domingo, estaba reservada la visita al circuito de Auto Rescate 4×4 en Los Ángeles de San Rafael, donde a voluntad de los interesados se recorrieron las diversas zonas trialeras, que fueron del agrado de conductores y… acompañantes, ya que todo el mundo se puso al volante. Ver evolucionar al coche propio y el del prójimo, supone todo un ejercicio de reciclaje en nuestra forma de conducción. A última hora de la mañana, una vez saciadas las ganas de rodar, tuvo lugar la despedida, más larga de los previsto, ya que los asistentes parecían no querer separarse unos de otros.
El grupo ya trabaja en la tercera reunión que tendrá lugar en marzo de 2024 en una zona muy especial para la práctica del todo terreno, la Siberia Extremeña, donde el grupo debería ver crecer el número de participantes con sus RAV 4 un modelo que abrió la brecha de los SUV en el mercado pero que atesora unas prestaciones todo terreno más que buenas a la hora de moverse en el monte con garantías.