LA MUJER DEL MES.
Si deportivamente en el mundo del motor a las mujeres les cuesta llegar a cumplir sus expectativas, a nivel empresarial las dificultades se multiplican.
La posibilidad de ocupar un puesto directivo en alguna de las compañías implicadas en el mundo del automóvil no se prodiga en demasía. Quien ocupa la sección este mes, es una de las excepciones que confirma la regla. No es como en casos anteriores una persona del sector precisamente, ni una aficionada que ha llegado hasta el puesto que ocupa por su interés en el automovilismo.
Es una profesional formada para un puesto de estas características, con el titulo de Administración y Dirección de empresas en el bolsillo. Su ocupación anterior, encuadrada en una multinacional japonesa dedicada a la electrónica, no parecía precisamente la actividad ideal para acabar en el mundo del motor,
pero todo cambio en 2.005 cuando tuvo la posibilidad de entrar a formar parte de la marca de vehículos Polaris dentro de la plantilla de CM Motorsport importador de la marca en aquellos años.
El reto le resulto muy atractivo ya que conocía la marca ya que su familia Primero estuvo en los departamentos comercial y post-venta, para posteriormente pasar al departamento de marketing como manager de la firma.
En 2.008 la marca dejo de trabajar en nuestro país a través de distribuidor implantando su propia filial. El movimiento empresarial no la afecto ni a ella ni a la mayoría de sus compañeros y desde entonces buena parte de la imagen de marca depende de Miriam. Fiel a la filosofía de la marca intenta estar lo mas cerca posible del cliente final, lo que la hace estar presente (y participe) en rutas, acciones promocionales y como no, en las carreras. Aunque en este ultimo caso alguna vez hay que ponerla falta.