El concepto no es nuevo. Los todo terreno han tenido en sus modelos de mayor éxito comercial versiones descapotables gracias a incorporar techos de lona o de fibra desmontables con mayor o menor dificultad.
Land Rover ha tenido en el Defender un buen ejemplo y mejorando la idea han dotado a su modelo estrella en ventas, el Evoque de una versión de techo practicable, acción que se lleva a cabo en tan solo dieciocho segundos, pudiéndolo hacer incluso en movimiento si no superamos los 48 kilómetros por hora de velocidad.
Así se convierte en el primer SUV compacto premium descapotable del mercado. Se comercializará en los acabados SE Dynamic y HSE Dynamic pudiéndose elegir entre el motor Si4 de gasolina y el 2.0 diésel. Mantendrá todas sus cualidades para rodar fuera del asfalto. Su precio de salida será de 54700 euros y estará en los concesionarios de la marca la próxima primavera.