La caravana salió de la localidad china de Ulan Ude, y tras pasar por Ulan Bator, llegaron al campo base del Everest, donde a las ordenes del grupo humano del estonio Valdis Pelcsh, colaboraron en la logisitca de la expedición.
Gracias a la movilidad en terreno abrupto del Land Cruiser 200 y del Land Cruiser Prado, los desplazamientos se acortaron en tiempo y lo que es mejor, cuando uno de los montaneros sufría algún percance, el tiempo de traslado a un centro medico se reducía drasticamente.