Esta carrera que en otros tiempos llegó a puntuar para el Mundial, languidece en cuanto a importancia deportiva pero crece en cuanto a exigencia y competición pura y dura. Una prologo y ocho etapas conforman su esquema que completa más de 4000 kilómetros de recorrido con más de la mitad contra el crono y una completa variedad de terrenos. La victoria fue para los locales Moraes (L)-Bertivoglio a bordo de una Toyota Hilux T1+ con especificaciones para este tipo de carrera.
Segundo lugar para el Century de Gastldi-Sachs, cerrando el podio otra Toyota la de Moraes (M)-Pedrosa todos brasileños. Debutó la Mitsubishi Tritón de la categoría en manos de Spinelli, sufriendo lógicos problemas de juventud. Una pena que ningún foráneo tomara la salida, pero los costos y la falta de puntuabilidad internacional, no invitan al desplazamiento.