DISTANCIAS CORTAS.
La cita portuguesa del mundial, ha mantenido la magia que la caracteriza, reuniendo pese al bajón en el número de inscritos a más publico en las cunetas y en los tramos espectáculo que nunca, manteniendo el ambiente festivo que rodea a esta competición.
Pese a que el titulo estaba decidido, el interés deportivo se mantenía ya que el subcampeonato estaba por decidir. Las condiciones de carrera fueron durísimas, con mucho barro y agua por las intensas lluvias de jornadas anteriores a la celebración de la carrera. Por muy difícil que pareciera en un principio, los a la postre ganadores, Miroslav Zapletal-Marcel Martin se hicieron con el subcampeonato, ya que con su primer puesto superaban a Schlesser por un punto en la tabla final. Difícil, ya que los segundos clasificados, Rui Sousa-Carlos Silva, tras quinientos kilómetros de carrera y tres días de competición entraron a menos de ¡un minuto! de los ganadores.
En cuanto a los españoles, Javier Herrador-Manuel Navarro, sufrieron de lo lindo ya que con el Herrator, un coche abierto, el agua campaba a sus anchas y el piloto debido a la escasa visibilidad hizo muchos kilómetros con la visera del casco abierta, lo que le obligo a pasar, tras la prueba, por el hospital al tener los ojos dañados con el barro.
Esta circunstancia les hundió hasta el puesto decimotercero de la tabla, tras haber rodado sin problemas en el quinto puesto. Daniel Cámara salió copilotando al italiano Paolo Biglieri a bordo de un Danisi. Una interminable sucesión de pinchazos les obligo a abandonar.