La edición de este año, ha sido exigente y dura con una semana de competición repartida en siete etapas. La practica totalidad de los equipos eran locales resultando vencedores Bagce-Tepe a bordo de un Toyota.
Se alternaron como es habitual, finales de etapa en hoteles con campamentos en lugares recónditos. Los veteranos Kurt-Dölek se clasificaron segundos a bordo de una Mitsubishi.
El podio en la categoría de coches lo cerró el Suzuki de los italianos Butto-Albertini, habituales del certamen transalpino.
En buggies ligeros, los Can Am, fueron legión, haciéndose con la victoria entre los pequeños modelos, Akiüz-Sancak.
Segundos en meta Yangin-Kutanoglu, precediendo a los italianos Butto-Albertini, terceros en meta.