Skoda lleva más de tres cuartos de siglo fabricando modelos 4×4. Ya en 1940 construía un camión militar denominado 3000 KFZ, llevando a cabo en los cincuenta el Babeta, de similares características. A finales de los noventa el Octavia incorporó la tracción total, y desde esa fecha, no han parado de aumentar en modelos equipados con el sistema.
El fabricante tiene una cifra incontestable. Siete modelos de su gama tienen tracción 4×4, algo solo superado por Volkswagen dentro de las marcas generalistas. Su sistema está basado en un embrague multidisco controlado electrónicamente, que permite de forma inmediata en colaboración con un bloqueo electrónico del diferencial poder rodar por superficies prohibidas para un vehículo convencional. Mayor altura al suelo y buenos ángulos característicos son el toque definitivo para los SUV de la marca.
Las matriculaciones de unidades de 4×4 respecto de las de tracción a un eje, alcanzan el 15% del total en nuestro país y dos puntos más en el resto del mundo. Desde el 2008, las ventas de versiones 4×4 se han triplicado, lo que anima a los hombres de Skoda a cuidar ese nicho de mercado. Para este año, las ventas generales de Skoda tienen previsto aumentar un 4,5% a nivel mundial, un 8% en Europa y un 7,5% en España.
Lejos de relajarse, continúan las novedades incorporando desde ya, un nuevo motor TDI de 110 c.v. pàra el Scout 4×4, y otro de 184 para el Octavia RS con cambio DSG. Esto a corto plazo ya que para finales de año llegará al mercado el Kodiaq un SUV 4X4 de carácter familiar, que precederá a mas novedades dentro de este tipo de vehículos que engrosaran la gama 4×4 de Skoda.