En concreto han sido ocho unidades de Nissan Navara, que pasan directamente a formar parte de del parque de vehículos de Protección Civil de la Comunidad Autónoma, y que servirán para tener mejor acceso a las «corredoiras», los complicados caminos gallegos demostrando así que el uso del todo terreno sigue siendo imprescindible de manera oficial y particular.